Soñando con un templo hermoso

Hoy en mi Tiempo con Dios, leemos el pasaje de 2 Reyes 12:1-8, donde hablamos de "Soñando con un templo hermoso".

La palabra que me da hoy mi devocional Tiempo con Dios es Vida Viva

Leemos y meditamos: 2 Reyes 12:1-8

1 En el séptimo año de Jehú comenzó a reinar Joás, y reinó cuarenta años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Sibia, de Beerseba.

2 Y Joás hizo lo recto ante los ojos de Jehová todo el tiempo que le dirigió el sacerdote Joiada.

3 Con todo eso, los lugares altos no se quitaron, porque el pueblo aún sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos.

4 Y Joás dijo a los sacerdotes: Todo el dinero consagrado que se suele traer a la casa de Jehová, el dinero del rescate de cada persona según está estipulado, y todo el dinero que cada uno de su propia voluntad trae a la casa de Jehová,

5 recíbanlo los sacerdotes, cada uno de mano de sus familiares, y reparen los portillos del templo dondequiera que se hallen grietas.

6 Pero en el año veintitrés del rey Joás aún no habían reparado los sacerdotes las grietas del templo.

7 Llamó entonces el rey Joás al sumo sacerdote Joiada y a los sacerdotes, y les dijo: ¿Por qué no reparáis las grietas del templo? Ahora, pues, no toméis más el dinero de vuestros familiares, sino dadlo para reparar las grietas del templo.

8 Y los sacerdotes consintieron en no tomar más dinero del pueblo, ni tener el cargo de reparar las grietas del templo.

Resumen del Pasaje Bíblico

Joás actúa con rectitud bajo la guía del sacerdote Joiada, pero no erradica los lugares altos, y el pueblo continúa sacrificando allí. Ordena a los sacerdotes reparar el templo con la plata que el pueblo aporta, pero sin éxito. Luego, ordena que el pueblo entregue directamente a los trabajadores del templo.