Hablemos palabra que edifica

1 Corintios 14:1-4 (RVR) Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis, porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende aunque por el Espíritu habla misterios. Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. El que habla en lengua extraña, así mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia.

El Apóstol Pablo empieza a hablar de los dones dados por el Espíritu Santo para su iglesia enseñando cómo debe mostrarse el amor, a través de la manifestación de los dones, y en la congregación.

Nos enseña que debemos procurar la profecía. Todos los dones son dados por el Espíritu Santo, el Apóstol quiere manifestar la necesidad de transmitir un mensaje y que los demás lo pudiesen entender. Habla de características específicas para la iglesia, un mensaje para edificación, exhortación y consolación.

Cada palabra que se diga a la iglesia traiga ánimo al espíritu, consuelo al corazón y fortaleza. Nos insta a profetizar y hablar para edificación mutua. Es necesario hacer uso de los dones para manifestar el amor de Dios.

Muchas veces a través de una palabra declarada con nuestra boca van a creer en el Señor y por fe en sus promesas.

Sé un instrumento de bendición, déjate usar por Dios para hablar palabras de edificación en tus conversaciones.

Ericka Ampié

Anciana Comunidad Hosanna