Dios, nuestro refugio

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Salmos 27:1

Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?
Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?

El versículo anterior nos invita a confiar sin reservas en el amor y la protección de Dios.

Esta Palabra nos enseña:

1. Confiemos de manera determinada en Dios.
2. Declaremos: Dios es mi luz y mi salvación.
3. No tenemos que temer, porque Dios es nuestra fortaleza.

En Dios encontramos un refugio seguro. Al confiar en Él como nuestra luz, salvación y fortaleza, podemos enfrentar cada día con confianza y paz. ¡Que esta verdad inspire y fortalezca nuestro caminar diario!

Léon Narváez

Anciano Comunidad Hosanna